La mayoría de los turistas que visitan Bélgica se conforman con visitar sus 4 joyas de la corona: Bruselas, Brujas, Gante y Amberes.
Pero Bélgica es un país muy interesante para conocer en su totalidad disfrutando de encantadores pueblos, preciosas plazas y tranquilos paisajes surcados por ríos.
Es un país que cuenta con una gran infraestructura ferroviaria, por lo que una opción muy interesante es utilizar el tren para desplazarse por las ciudades flamencas y valonas.
Pero sin duda la mejor opción para conocer los lugares más importantes de Bélgica es realizando una ruta en coche.
¡Te cuento nuestra Experiencia Viajera por Bélgica en coche!
¡Las actividades top en Bruselas!
Aquí te dejo los enlaces a mis actividades favoritas en Bruselas:
Itinerario con mapa de la ruta por Bélgica en coche en dos semanas
Nuestro viaje por Bélgica en coche durante quince días comienza en la ciudad valona de Tournai y termina en la ciudad fronteriza de Bouillon.
En esta ocasión decidimos llegar a Bélgica en nuestro propio coche conduciendo desde casa, por lo que tanto a la ida como a la vuelta haremos una noche en Francia para que el viaje no sea tan largo.
En nuestro roadtrip por Bélgica recorremos los pueblos más bonitos de Flandes, pero también los pequeños pueblitos de la Valonia rural.
En este mapa puedes ver el resumen diario de nuestro recorrido por Bélgica en coche:
Día 1: Parque Astérix
Día 2: Tournai y Mons
Día 3: Zoo de Pairi Daiza
Día 4: Ypres, Diksmuide y Veurne
Día 5: Costa Belga
Día 6: Brujas y Damme
Día 7: Gante
Día 8: Amberes
Día 9: Malinas y Lovaina
Días 10 y 11: Bruselas
Día 12: Namur y Dinant
Día 13: Grutas de Han y Durbuy
Día 14: Bouillon, Sedán y Chinón
Día 15: Vuelta a casa
Nuestra Experiencia Viajera o Ruta por Bélgica en coche
Te voy a contar lo que hemos hecho cada uno de los días de nuestro viaje por Bélgica: qué pueblos hemos visitado, qué ver en cada uno de ellos, dónde nos hemos alojado…
Pero además, por cada uno de los lugares que hemos visitado he elaborado un post muy detallado donde podrás ampliar la información para organizar tu visita.
Con muchas ideas y consejos tras nuestra Experiencia Viajera… Porque una vez visto, todo el mundo es listo…
¿Vamos?
Día 1: Parque Astérix (Francia)
Esta vez nos animamos a hacer algo diferente y para evitar caravanas decidimos conducir durante toda la noche (unas 9 horas) para llegar a primera hora al Parque Astérix en Francia.
El aforo a este estupendo parque temático es limitado, por lo que te aconsejo que lleves tus entradas para el Parque Astérix compradas con antelación.
Además, si compras tus tickets online tendrás un descuento sobre el precio de taquilla. Eso sí, tienes que hacerlo con un mínimo de 7 días de antelación sobre el día de tu visita.
➜ Puedes comprar tus entradas para el Parque Astérix aquí, como hicimos nosotros. Al llegar solo tuvimos que canjear el comprobante que nos llegó al mail en taquilla y para adentro a disfrutar a lo grande.
El Parque Astérix es un parque de atracciones muy divertido ambientado en la aldea gala de Astérix y Obélix.
Vive bajo la sombra de su vecina Eurodisney, pero es el parque favorito de los franceses.
Toda la decoración está muy cuidada y se recrean 6 mundos (Galia, Egipto, Grecia, Roma, Vikingos y A través del tiempo).
Para que te hagas a la idea, es como Portaventura pero más pequeño. Eso sí en extensión, porque en número de atracciones no tiene nada que envidiarle.
Las atracciones son muy similares a las más emblemáticas del parque catalán, algunas incluso más emocionantes.
También puedes hacerte fotos con Astérix, Obélix, Panorámix y el resto de la tribu, disfrutar de los desfiles y divertirte con los espectáculos.
Un día en familia muy recomendable si te gustan los parques de atracciones.
➜ ¿Dónde dormir cerca del Parque Astérix?
Tras tanta adrenalina, toca descansar… Te recomiendo alojarte en el Hotel Ibis Budget Senlis que nos alojamos nosotros, a tan solo 10 minutos en coche del Parque Astérix.
Es un Ibis muy sencillo, pero muy barato. Era lo que buscábamos para dormir una noche de paso antes de llegar a Bélgica.
Día 2: Tournai y Mons
En el segundo día de esta ruta por Bélgica en coche alcanzamos tierras belgas.
Nuestra primera parada de la mañana tras dos horas de viaje es el pueblo de Tournai en Valonia, donde alucinamos con su impresionante plaza, su enorme catedral y su esbelto Beffroi.
Por la tarde, visitamos otro precioso pueblo valón, Mons, que fue capital europea de la cultura en el 2015.
▫ Tournai
Tournai, con sus más de 2000 años de historia, es una de las ciudades de Bélgica más antiguas y con más patrimonio histórico.
Aparcamos el coche en un parking gratuito que está a tan solo 5 minutos caminando del centro histórico y tras enfilar la Rue Saint Martin entre preciosas casas de estilo Art Nouveau, avistamos el sorprendente campanario o Beffroi de Tournai, el más antiguo de toda Bélgica.
Tanto el campanario como la espectacular Catedral de Notre-Dame están declaradas como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, por lo que son dos joyas imprescindibles que ver en Tournai.
Justo al lado, está la impresionante Grand Place de Tournai con bonitas casas de estilo belga y edificios tan bellos como la Iglesia de San Quintín, la torre medieval de Fort Rouge o la majestuosa Lonja de los Paños o Halle aux Draps.
Al otro lado del río, Tournai también cuenta con otros edificios históricos como el antiguo puente fortificado de Pont des Trous, la Torre de Enrique VII o la enorme estación de tren del año 1879.
Por si todo es todo fuera poco, en Tournai hay museos muy interesantes entre los que destacan el Museo de Bellas Artes diseñado por Víctor Horta o el Museo folklórico, para conocer de forma didáctica la historia y costumbres de sus habitantes.
Por cierto, hay un tren turístico que sale de la Oficina de Turismo que está junto a la Catedral. Nosotros nos quedamos con mucha pena de no hacerlo, pero ya no había más hasta la tarde. Si estás interesado no está demás informarte con antelación de los horarios.
▫ Mons
Tras reponer fuerzas, ponemos rumbo a Mons que está a media hora en coche de Tournai.
Dejamos las maletas en nuestro alojamiento y lo primero que visitamos es el famoso Campanario o Beffroi de Mons, también declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Esta vez accedemos a su interior para ascender hasta sus casi 87 metros de altura y disfrutar de unas magníficas vistas de Mons en 360º.
La subida es fácil ya que es en ascensor, pero para bajar hay que ir con cuidado por sus escaleras de caracol.
Continuamos nuestra ruta turística por Mons visitando la enorme Colegiata de Santa Waudru. Un espectacular templo tanto por fuera como por dentro.
Y por fin llegamos a la Grand Place de Mons, con bonitas casas, terrazas y con el Ayuntamiento u Hotel de Ville como protagonista.
Por desgracia está en obras y eso nos impide disfrutar de su majestuosidad y de acariciar al símbolo de la ciudad, una mona conocida como la Singe du Grand Garde.
Eso sí, atravesamos el túnel bajo la fachada del ayuntamiento para disfrutar de los preciosos Jardines del Mayeur y sus famosas esculturas como el Ropieur.
Aquí también se encuentra el museo más famoso de la ciudad, el Museo de la Doudou o de la Ducasse de Mons.
El Doudou es la celebración más importante de Mons, que ha sido incluida como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. La multitud acompaña en su carroza de oro a Santa Waldru, pero el momento culmen de la fiesta es el Combate de Lumeçon. Una recreación medieval de San Jorge luchando con el dragón. ¡Es impresionante! Te lo cuento al detalle en el post específico.
Continuamos la visita hasta la cercana Iglesia de Santa Elisabet, frente al Palacio de Justicia y la Maison Losseau, que en su interior es una auténtica joya del Art Noveau.
Finalizamos el día cenando una pizza artesanal en el restaurante La primavera, junto a la animada plaza central de Mons. ¡Buenísimaaaaa!
➜ ¿Dónde dormir en Mons?
Por primera vez en nuestra vida nos alojamos en un albergue, en el Auberge de Jeunesse de Mons. Tenemos una habitación privada con literas y baño, y el precio incluye además un completo desayuno.
El albergue está ubicado pegado al campanario, de hecho desde la terraza del bar se disfruta de sus vistas. El albergue además cuenta con zona de juegos con ping pong, billar y futbolín donde lo pasamos en grande.
Día 3: Zoo de Pairi Daiza
Tras disfrutar de un saludable desayuno ponemos rumbo a uno de los lugares que más nos sorprendió de nuestra ruta por Bélgica en coche.
Se trata del Zoo de Pairi Daiza a menos de 20 kilómetros de Mons.
Es un zoológico que te va a encantar por los muchos animales de los que vas a poder disfrutar: gorilas, leones, morsas, osos polares, osos pandas, pingüinos…
Pero sobre todo te dejará con la boca abierta por la decoración de los hábitats y los distintos mundos por los que vas a viajar: el templo de Angkor, los templos chinos, cuevas heladas…
Realmente es una pasada y una visita que te recomiendo que incluyas en tu itinerario por Bélgica si eres amante de los animales, viajes con niños o sin ellos.
En el enorme recinto hay restaurantes de todo tipo, tiendas de recuerdos, zonas de juegos… Hay hasta un tren turístico para recorrer algunas de las zonas del zoo.
Y a última hora las actuaciones musicales ponen la guinda a un fantástico día.
Y si además quieres más, el zoo cuenta con habitaciones en las que poder alojarte mirando a los lobos o a los osos, entre otros.
He visto muchos zoos, pero ninguno tan impresionante como éste. Por algo ha sido catalogado como el mejor zoo de Europa. ¡No te lo pierdas!
Día 4: Ypres, Diksmuide, Veurne y Oostduinkerke
En nuestro cuarto día de ruta por Bélgica en coche durante dos semanas dejamos atrás las tierras Valonas, por el momento, para adentrarnos en tierras Flamencas.
Durante la mañana visitamos el precioso pueblo amurallado de Ypres, famoso por ser uno de los lugares de la ruta por los campos de batalla de la I Guerra Mundial.
Al mediodía conocemos Diksmuide que cuenta con una preciosa plaza y las famosas trincheras de Dodengang.
Después, nos encaminamos hacia la costa, hacia Oostduinkerke donde pasaremos la noche, pero antes hacemos una pequeña parada en Veurne. Otro apacible pueblo de Flandes donde disfrutar de su bella plaza.
▫ Ypres
La ciudad de Ypres o Ieper (flamenco), es uno de los lugares más famosos de la zona en la que tuvieron lugar las sangrientas batallas de la I Guerra Mundial.
Hoy en día se pueden visitar diferentes trincheras, cementerios y monumentos conmemorativos en los alrededores.
Pero seas un apasionado o no de este tipo de hechos históricos, Ypres merece una visita por la belleza de su Grote Markt y las preciosas calles que le rodean.
Dejamos el coche justo al lado del río con la preciosa estampa de las murallas defensivas y la impresionante puerta de Menin dándonos la bienvenida.
La Menin Gate o Puerta de Menin es un impresionante monumento conmemorativo que impresiona por sus dimensiones, las inscripciones de los más de 50.000 soldados británicos que murieron en la zona y las ofrendas florales. De hecho cada día a las 20 horas se sigue homenajeando a los caídos.
Nos adentramos por Menenstraat y sus preciosas casas ya nos anuncian la belleza de esta ciudad, hasta llegar a la gran plaza de Ypres.
Es día de mercado y los puestos no nos dejan disfrutar de su estampa totalmente, pero al fondo sobresale el majestuoso edificio del Salón de Telas o Lakenhalle, el más bello de toda la región de Flandes. ¡Te dejará sin palabras!
Hoy es el Ayuntamiento y también acoge la Oficina de Turismo y el Museo de los Campos de Flandes.
Otra de las joyas de Ypres es la Catedral de San Martin. No dejes de visitar su precioso interior.
Después callejeamos por sus animadas calles adyacentes hasta llegar a la Iglesia de Santiago y justo al lado vemos las Casamatas.
Son unas estructuras subterráneas que servían para el refugio de las tropas y que hoy albergan bares, restaurantes y tiendas.
Aunque no suele estar en la lista de ciudades a visitar en Bélgica, Ypres merece mucho una pequeña visita.
▫ Diksmuide
Nuestra siguiente parada es el pueblo de Diksmuide, a menos de 20 minutos de Ypres.
Lo primero que visitamos es la impresionante torre IJzertoren, un museo con exposiciones sobre la primera guerra mundial.
Está junto al canal, que no es lo que se dice bonito la verdad, pero cuenta con parking gratis y unas mesas donde hacemos un picnic con las ensaladas de pasta que hemos comprado en el supermercado.
Cogemos el coche y nos acercamos al centro histórico de Diksmuide, muy cerca de su gran plaza.
Aquí también es día de mercado, por lo que aunque los puestos y los coches nos afean la foto, la belleza de la Grote Markt es tal que nos quedamos embobados mirándola.
La plaza está rodeada de casitas típicas belgas de piedra clara y tejados de pizarra negra.
Entre todos los preciosos edificios destacan el Ayuntamiento del año 1428 y la Iglesia de San Nicolás, bajo la atenta mirada de la curiosa escultura de “Hombre en la luna”.
Callejeamos un poco hasta llegar a un puente que cruza el río Yser que nos lleva hasta el Beguinaje.
Los Beaterios son muy comunes en Bélgica, llamados también pueblo dentro del pueblo.
Las Beguinas eran mujeres que enviudaban o no querían depender de un hombre y vivían en comunidad en estos recintos. Aunque hacían voto de castidad y de fe, no eran monjas y podían salir y entrar a su gusto y trabajaban para ganarse un sustento en la ciudad.
Nosotros no lo visitamos, pero a 3 kilómetros de la Grote Markt están las trincheras de Dodengang que se pueden visitar.
Son las únicas trincheras belgas que se conservan de la I Guerra Mundial y se puede caminar por ellas junto a diferentes pantallas interactivas y objetos.
▫ Veurne
Nuestra última parada del día antes de llegar a la costa belga es el pueblo de Veurne.
En este caso en vez de mercado, lo que invade la plaza principal son las barracas y puestos de feriantes, por lo que es imposible hacerse una idea de la belleza de la plaza. ¡Menuda mala suerte!
En su Grote Markt destacan el Ayuntamiento, que pudimos visitar por dentro, el Palacio de Justicia, donde está la Oficina de Turismo, el Pabellón español y la antigua lonja de carne.
Los otros dos edificios históricos que destacan en la Plaza de Veurne son la Iglesia de Sint-Walburga y la Iglesia de Sint Niklaas y su torre.
A ver si tú tienes más suerte y puedes disfrutar de la Grote Markt de Veurne en todo su esplendor.
▫ Oostduinkerke
A media tarde llegamos a nuestro destino en la costa belga en este cuarto día de recorrido por Bélgica, a Oostduinkerke.
Oostduinkerke es famoso por mantener la tradición de pescar a caballo con red en la orilla de la playa. Realmente es una actividad muy curiosa de ver.
Recorremos su animado paseo marítimo paralelo a la larga playa y bajo la sombra de los enormes apartamentos.
No podemos resistirnos a caminar por la fina arena y a tocar las aguas del mar del norte. Y para nuestra sorpresa son mucho más cálidas de lo que teníamos en mente.
Nos sentamos a cenar en el restaurante italiano Da Noi, uno de las muchas terrazas que flanquean a costa.
Y por fin probamos los deliciosos gofres belgas o waffles en flamenco.
➜ ¿Dónde dormir en la costa belga?
Hay distintos pueblos en los que podrás alojarte si quieres conocer las largas playas de arena de la costa de Bélgica. En nuestra primera noche nos alojamos en el Hotel Vakantiedomein Hoge Duin en Oostduinkerke.
Las habitaciones son espaciosas, cuenta con restaurantes, zona de juegos y parking gratuito.
Día 5: Recorriendo la costa belga: De Panne, Nieuwpoort, Oostende, De Haan y Blankenberge
Como no podía ser de otra manera en nuestro quinto de viaje por Bélgica en coche la ley de Murphy hace presencia…
Queríamos dedicar este día en la costa de Bélgica para conocer alguno de los pueblos costeros más famosos y alternarlo con un poco de sol en la playa y baños en el mar del norte, pero el día sale completamente nublado y con un desagradable viento.
Así que al mal tiempo buena cara y a buscar alternativas…
La costa belga cuenta con 60 kilómetros de largo y no han desperdiciado ni un milímetro. La verdad que nos llevamos un poco de chasco, ya que nos imaginábamos pueblitos más cuidados y toda la franja costera está llena de apartamentos monstruosos que se elevan hasta el cielo y más allá.
Al menos las playas son preciosas, con arena fina y muy largas. Además hay mucho ambiente de los belgas que veranean en sus segundas residencias, con muchos restaurantes, chiringuitos, tiendas…
En todos los pueblos puedes alquilar bicicletas para 4, 6, 8… personas y recorrer el paseo, su actividad favorita.
▫ De Panne o La Panne
Comenzamos nuestra andadura mañanera por la costa belga en el pueblo de La Panne, junto a la frontera con Francia.
El paisaje no cambia nada y nos reciben las mismas moles de edificios, pero al menos amenizado por la banda municipal.
Se pone a chispear por lo que nos resguardamos en una sala de recreativos y la verdad que nos lo pasamos en grande echando unas carreras de coches.
▫ Nieuwpoort
Nuestra siguiente parada es el pueblo costero de Nieuwpoort.
Hay muchísimo tráfico y viendo que el decorado no cambia, decidimos ir al centro del pueblo en vez de ir a la playa.
Todo un acierto, ya que nos encontramos con una preciosa plaza rodeada de casas típicas belgas, iglesias y torres.
▫ Ostende
Dejamos a un lado la carretera de la costa ya que es un poco agobiante, cada dos por tres hay pasos de cebra con peatones y bicis cruzando. Y tomamos la carretera secundaria que es algo más tranquila.
Por cierto, si lo prefieres hay un tren que recorre toda la franja costera de belga.
Llegamos a Ostende, el pueblo más importante de toda la costa belga, el centro de veraneo por excelencia, por ende el que está más abarrotado. Es como un Benidorm a lo bestia….
Damos unas cuantas vueltas y todos los parkings están hasta la bandera. Si no fuera porque es el sitio en el que tenemos que dormir esta noche lo hubiéramos pasado de largo, la verdad. ¡Qué agobio!
Por fin dejamos el coche a unos 15 minutos del paseo marítimo. Para quitar el estrés mis chicos deciden irse a correr por la playa y yo aprovecho para conocer los lugares más importantes de Ostende.
Ostende cuenta con algunos monumentos interesantes como el Kursaal o Casino, las galerías venecianas, las galerías reales o la neogótica Catedral de Sint-Petrus.
Para relajarnos del todo nos damos un refrescante baño en las aguas del norte. Ahora entendemos porque no se baña nadie. La temperatura es buena, pero la corriente es muy fuerte por lo que solo puedes meterte por encima de las rodillas.
Hacemos el check-in y decidimos seguir nuestra visita por la costa belga…
▫ De Haan
A partir de aquí el tráfico disminuye considerablemente y llegamos a De Haan, el pueblo más bonito de la costa belga.
Por fin, los horribles bloques de cemento se sustituyen por casitas típicas belgas.
El ambiente también es mucho más relajado, por lo que si quieres pasar un día en la costa este es el lugar que te recomiendo.
Aunque eso sí, el viento es más fuerte que en los otros pueblos y por ello es un lugar perfecto para los amantes del kitesurf.
▫ Blankenberge
Sobre las 6 de la tarde llegamos al siguiente pueblo importante de la costa de Bélgica, Blankenberge.
Había leído que en su puerto había leones marinos en libertad, pero nosotros no vimos ninguno…
El paisaje de apartamentos en el paseo marítimo se repite, por lo que optamos por pasar un rato súper divertido jugando al minigolf.
▫ Knokke-Heist
Knokke-Heist era el último de los pueblos costeros de Bélgica que teníamos apuntado, muy cerca de la frontera con Holanda.
Como el tiempo no acompaña decidimos no visitarlo, ya que el paisaje del paseo marítimo es igual que lo que hemos visto a lo largo del día, exceptuando de Haan.
Si eres amante de los pájaros y te gusta verlos en su hábitat, sí merece la pena acercarse a Knokke-Heist, concretamente al Parque natural de Zwin.
Ponemos rumbo a Ostende y tras hacer una paradita en el Fuerte de Napoleón nos vamos a cenar a nuestro apartamento tan ricamente.
Mi recomendación es que a no ser que haga muy bueno y tu objetivo sea tomar el sol en la playa, no te acerques a la costa belga. Las playas son bonitas, pero los pueblos no ofrecen nada especial a nivel monumental.
Quizá si hubiese lucido el sol nuestra sensación hubiera sido otro, pero esto es lo que te puedo decir de nuestra Experiencia Viajera.
➜ ¿Dónde dormir en Ostende?
Nosotros nos alojamos en el Getaway studios The Providence Ostende, a 2 minutos de la playa.
El apartamento estaba genial. Muy limpio, espacioso y con cocina que agradecimos mucho al llegar a la noche.
Día 6: Brujas y Damme
Dejamos atrás la costa y en menos de media hora llegamos a uno de los lugares más bonitos de Bélgica, la ciudad de cuento de Brujas.
Hoy vamos a dedicar el sexto día a conocer a fondo esta preciosa ciudad, donde además haremos noche, para disfrutarla iluminada y cuando la mayoría de los turistas se van. Ya que mucha gente la visita en una excursión en tren desde Bruselas.
Como es lunes y los museos están cerrados, por la tarde alquilamos unas bicis para llegar al vecino pueblito de Damme con su molino como protagonista.
Y es que en Bélgica seas deportista o no te entran ganas de andar en bicicleta, ya que a los belgas les apasiona usarla.
▫ Brujas
La ciudad medieval de Brugge está llena de edificios históricos, de rincones con encanto junto a los canales y de importantes museos.
El centro histórico de Brujas se recorre fácilmente caminando, pero te recomiendo que conozcas su historia y la importancia de esta preciosa ciudad con un guía local.
➜ Nosotros descubrimos los encantos de Brujas con un tour de 2 horas, muy completo y que te recomiendo que no te pierdas. Así harás un recorrido por los lugares más importantes de Brujas de forma amena. Reserva tu free tour de Brujas con tiempo, porque Brujas es una de las ciudades más turísticas de Bélgica.
Como no podía ser de otra forma, el punto de encuentro es la Plaza Mayor de Brujas conocida como Grote Markt en flamenco.
Una plaza que te va a maravillar, ya que es una de las plazas más bonitas de Bélgica.
El absoluto protagonista del Grote Markt de Brujas es la imponente Torre del Campanario o Belfort de 83 metros de altura, emblema del pasado mercantil glorioso. Aunque el precio es excesivo, si quieres tener unas buenas vistas, puedes subir a lo más alto.
En la plaza hay otros importantes edificios como el Museo de Historia, en la que también está la Oficina de Turismo, las casas gremiales o el edificio de la Corte Provincial.
Otra de las preciosas plazas de Brujas es la vecina Burg, donde se encuentra el majestuoso Ayuntamiento de Brujas o Stadhuis, la antigua casa del registrador y la preciosa Basílica de la Santa Sangre, con un interior alucinante.
Nuestra visita continua por el mercado de pescado hasta llegar al lugar más fotografiado de Brujas, el Muelle del Rosario (Rozenhoedkaai).
Pero sin ninguna duda el gran atractivo de Brujas son sus canales que puedes recorrerlos en barcos. La verdad es que se han subido a la parra con los precios y los barcos van como salchichas, pero es una de las turistadas que hay que hacer sí o sí.
Otros lugares que no debes perderte en tu paseo por Brujas son: el apacible Beginhof o Beatorio, el romántico Minnewater o lago del amor, la Iglesia de Nuestra Señora, la Catedral de San Salvador o el Hospital de San Juan.
Además en Brujas podrás disfrutar de 3 excelentes museos: el Museo Gruuthuse, ubicado en una mansión del siglo XV con tapices, muebles y objetos de incalculable valor, el Museo Arentshuis, ubicado en una imponente mansión con obras temporales, y el Museo Groeninge, un estupendo museo de bellas artes con obras de artistas flamencos como Jan van Eyck o el Bosco.
Piérdete por sus callejuelas, disfruta de los canales de Brujas y no te olvides de probar los mejores bombones de chocolate artesanal del país en una de sus muchas confiterías, ni la cerveza local Brugge Zot.
▫ De Brujas a Damme en bicicleta
Como nuestra visita a Brujas coincide en lunes y los museos están cerrados, nos quedamos con las ganas de visitar el Museo de Bellas Artes Groeninge.
Así que como plan alternativo para la tarde decidimos alquilar unas bicicletas y sentirnos como auténticos belgas, pedaleando hasta el vecino pueblo de Damme.
Llegar hasta Damme en bici desde Brujas es muy sencillo, hay que hay un ancho carril bici que va paralelo al canal de Damse Vaart.
Alquilamos las bicis para 4 horas por 10€ cada una en la empresa Bruges Bike Rental y nos ponemos en marcha.
Lo primero que hacemos es llegar hasta la preciosa Plaza Jan van Eyck que nos faltaba por visitar en el centro histórico de Brujas. La estatua de pintor preside el lugar, donde antaño se encontraba el puerto comercial de Brujas.
Y ahora sí, enfilamos el camino a Damme que nos lleva unos 20 minutos de pedaleo.
Al llegar no recibe el precioso molino Schellemolen que se ha convertido en la estampa oficial de Damme y unas casitas típicas belgas.
Damme es muy pequeño, pero cuenta con una coqueta placita presidida por el ayuntamiento y la iglesia Onze Lieve Vrouwekerk.
Es un pequeño pueblito, con callejuelas bien cuidadas, con bonitas casas y bares donde tomarse algo tranquilamente.
De regreso a Brujas aprovechamos para visitar la zona de Kruistvest, donde se alzaba la muralla de Brujas. Hoy en día se puede apreciar su foso, la impresionante puerta de Kruispoort y los 4 de los 20 molinos que había en la ciudad en época medieval.
Tras dejar las bicis, disfrutamos de una estupenda cena en la Grote Markt y disfrutamos de la Brujas iluminada y sin turistas con una copa de vino local.
➜ ¿Dónde dormir en Brujas?
Nuestro hotel en Brujas, el Hotel du Théâtre, es de esos que no se olvidan por su excelente ubicación al lado de la Plaza Mayor y al parking donde dejamos el coche.
Además, es un hotel muy nuevo, con amplias habitaciones y muy acogedor. Te lo recomiendo sin duda.
Día 7: Gante
En el ecuador de nuestra ruta por Bélgica en coche dejamos atrás la ciudad medieval de Brujas para conocer otro de los pueblos más bonitos de Bélgica, Gante.
Gante o Gent (en flamenco) cada vez atrae a más turistas y es que tiene encantos de sobra para pasar un precioso día recorriendo sus calles.
Además Gante es una ciudad con mucha vida local, restaurantes y buen ambiente.
A diferencia de los pueblos y ciudades de Bélgica, Gante no cuenta con una Plaza Mayor o Grote Markt. Sus edificios más importantes están repartidos en distintas plazas y calles.
➜ Para conocer la historia de esta bonita ciudad belga y no perdernos ninguno de sus rincones imprescindibles, nosotros elegimos conocerla con un estupendo tour guiado. Te recomiendo que no te pierdas este free tour por Gante de 2 horas, ya que es muy completo y ameno.
Aparcamos el coche en el parking que está pegadito a nuestro hotel y ponemos rumbo al centro histórico de Gante.
Pasamos junto al precioso Castillo gótico de Gerardo el Diablo hasta llegar a nuestro punto de encuentro, bajo los pies del impresionante Belfort o campanario de Gante declarado Patrimonio de la Humanidad. Mide 91 metros hasta el dragón que remata su aguja y se puede subir en ascensor para disfrutar de las mejores vistas de Gante.
Junto al campanario se encuentra el Teatro Real Neerlandés y al enfrente, otra de los edificios más impresionantes de Gante, la Catedral de San Bavón.
Es una impresionante catedral gótica del año 1200 que tardó varios siglos en construirse, pero además, dentro esconde una obra maestra de Van Eyck, La Adoración del cordero místico. La entrada a la catedral es gratuita, pero para ver el tríptico de Van Eyck tendrás que pagar 12.50€… ¡Una barbaridad, sí!
Muy cerca, en la calle Botemarkt se encuentra el bello ayuntamiento o Stadhuis de Gante, que es la curiosa suma de dos estilos arquitectónicos.
Continuamos este tour por Gante por la Iglesia de San Nicolás (Sint Niklaaskerk), la iglesia de los mercaderes del siglo XIII.
Y llegamos a la animada plaza de Korenmarkt, llena de restaurantes y con el precioso edificio de correos como protagonista.
Desde el puente de San Miguel, junto a la Iglesia del mismo nombre, se obtiene la típica fotografía de Gante con las 3 torres: la de la catedral, el campanario y la Iglesia de San Nicolás.
Llegamos a otro de los lugares con más encanto de Gante, los muelles de Graslei y Korenlei con bonitas casas gremiales y la aduana. Desde aquí parten los barcos que recorren los canales y la verdad que merecen más la pena que los de Brujas.
Y muy cerca queda otro de los edificios más importantes de Gante, Gravensteen o el Castillo de los Condes de Flandes, que se puede visitar.
Nos quedamos cenando una pizza para disfrutar de Gante de noche, una de las ciudades mejor iluminadas del mundo.
➜ ¿Dónde dormir en Gante?
Para nuestro hotel en Gante nos decantamos por el Getaway Studios Gent y de nuevo es todo un acierto.
Un espacioso alojamiento con cocina a 5 minutos andando de la Catedral de Gent y pegado a un parking. ¡Muy recomendable!
Día 8: Amberes
El octavo día de nuestra ruta por Bélgica lo dedicamos íntegramente a conocer otra de las joyas de Flandes que a veces se queda relegada.
Se trata de Amberes o Antwerp (en flamenco), una ciudad que te recomiendo que no te pierdas.
➜ Eso sí, te aconsejo conocer Amberes con un guía local, ya que es una ciudad grande y te puede costar más descubrirla. Nosotros la visitamos con un free tour por Amberes y nos quedamos encantados con todo lo que aprendimos y todo lo que visitamos.
Amberes no es una ciudad tan mágica como Brujas o tiene tanto encanto como Gante, ya que no dispone de canales a la vista, pero sí soterrados y se pueden visitar…
Eso sí cuenta con importantes edificios, excelentes museos y una Plaza Mayor preciosa.
Y por supuesto, si eres fan de Rubens es una ciudad de visita obligada ya que aquí se encuentran muchas obras de este pintor flamenco.
Comenzamos la visita en la Grote Markt de Amberes, que es realmente espectacular. Esta vez la foto se nos estropea un poco porque nos toca el mercado de antigüedades. ¡Vaya!
En la gran plaza de Amberes destaca en el medio la gran Fuente de Bravo con el Stadhuis o Ayuntamiento y las impresionantes casas gremiales decoradas con esculturas doradas flanqueándola.
Justo al lado está la impresionante Catedral de Nuestra Señora de Amberes (Onze Lieve Vrouwe Kathedraal) de 121 metros de alto. Dentro esconde tres obras de Rubens por lo que solo podrás verla por dentro previo pago de 12€.
La visita continua por las casas del siglo XVI que se conservan en Amberes. Para ello tienes que meterte por el callejón del restaurante “T Hoke” y pasearás por los patios interiores rehabilitados por un arquitecto local.
Junto al río queda el precioso Castillo Steen, donde hoy se encuentra la oficina de turismo.
Si te gusta el arte de los pintores flamencos, especialmente de Rubens, no debes perderte la Iglesia de San Pablo (Sint Pauluskerk).
Y tampoco la preciosas Iglesia jesuita de San Carlos Borromeo diseñada por Rubens y que se ubica en una plaza junto a la antigua Biblioteca. Dentro de la iglesia había 39 pinturas en los techos de Rubens, pero por desgracia se quemaron en un incendio.
Y siguiendo con Rubens, puedes visitar la Casa de Rubens en Amberes (Rubenshuis). Solo hay un par de cuadros del pintor, aunque sí hay de otros artistas. Es más una visita para ver el lujo en el que vivía.
Se accede por la gran avenida Meir llena de tiendas. Aquí no te pierdas la chocolatería Line dentro del Paleis Op de Meir, antigua casa de Napoleón. Exquisito chocolate y auténticas obras de arte hechas de este dulce.
Recorremos la consiguiente Leystrasse hasta llegar a la impresionante estación central de Amberes. No dejes de visitarla también por dentro.
Junto a ella se encuentra el Zoo de Amberes y el Chocolate Nation. Es el museo del chocolate más grande del mundo, pero realmente para el precio que tiene no merece la pena visitarlo. Mejor comprarte unos cuantos bombones en una chocolatería.
Otra de las grandes razones para no perderse la visita a Amberes es si quieres hacerte con un diamante, ya que el 80% del tráfico mundial de diamantes pasa por aquí. Y es aquí donde se encuentra el barrio del diamante de Amberes llena de tiendas de esta joya.
Y si quieres saber más sobre el tema, junto a la Grote Markt se encuentra el DIVA, el museo del diamante.
Otros museos muy interesantes que podrás visitar en Amberes son: el Museo Platin-Moretus, Patrimonio de la Humanidad dedicado a los orígenes de la imprenta y que cuenta con salas decoradas por maestros flamencos; el ModeMuseum (MoMu), dedicado a la alta costura; el KMSKA, que es el Museo Real de Bellas Artes; o el MAS, el museo moderno que reúne la historia marítima y folclórica de la ciudad. Desde su azotea, gratuita, hay unas vistas impresionantes de Amberes.
Como ves atractivos no le faltan a la mayor ciudad portuaria de Bélgica para visitarla durante al menos un día.
➜ ¿Dónde dormir en Amberes?
El hotel elegido para dormir en Amberes fue el Hotel Citystay Amberes, muy cerca de la Plaza Mayor y con un parking justo al lado.
La habitación muy espaciosa, camas muy cómodas y silencio absoluto. Sin duda una elección de 10 en Amberes.
Día 9: Malinas y Lovaina
Seguimos con este fascinante recorrido por Bélgica, conociendo los pueblos más bonitos de Flandes.
En nuestro noveno día de ruta en coche hacemos una pequeña parada en Malinas para visitar su bonita plaza y la inmensa torre de la Catedral de San Romuldo.
Nuestro objetivo de hoy es la animada ciudad universitaria de Lovaina, donde haremos noche, y que presume de tener la barra del bar más larga del mundo…
En Lovaina vas a alucinar con la fachada de su ayuntamiento, el enorme beguinaje y la preciosa biblioteca.
▫ Malinas
Malinas o Mechelen (en flamenco) es una tranquila ciudad junto al río Dilje y es la sede del arzobispado de Bélgica.
En la misma Grote Markt hay un parking subterráneo, por lo que tras dejar nuestro coche, la belleza de su plaza nos embauca.
La Grote Markt de Malinas está rodeada de preciosas casas gremiales, del ayuntamiento de cuento de hadas y del elaborado Palacio del Consejero.
Al fondo se ve la torre de la Catedral de San Romualdo (St Romboutskathedraal) a la que se puede subir y que con sus 49 campanas posee el mejor carrillón de toda Bélgica.
Merece la pena visitar el interior de la Catedral, ya que es muy agradable y se respira auténtica paz.
Tomamos la calle Befferstraat, junto al palacio, para llegar a la Iglesia de San Pedro y San Pablo, al Palacio de Margarita de York y al Palacio de Margarita de Austria.
➜ A nosotros no nos encajó el día, pero hay un Free Tour por Malinas muy interesante para descubrir la ciudad y conocer el vínculo de España con Bélgica, ya que aquí se crio con su tía Carlos V, el emperador del Sacro Imperio Romano Germánico.
Volvemos sobre nuestros pasos y nos encaminamos a la Oficina de Turismo de Malinas ubicada en la antigua Casa del Regidor (Schepenhuis).
Continuamos por esta calle hasta llegar al puente de Dijlepad, donde hay bonitas casas que miran al canal, en las que destacan las fachadas de Haverwerf.
Si continuas hasta el final está la Puerta de Bruselas, el acceso medieval a Malinas.
Paseamos junto al río y llegamos al Gran Beguinaje de Malinas y unos metros más allá está el pequeño Beatorio.
Nos despedimos de Malinas tras recorrerla durante un par de horas y ponemos rumbo a Lovaina.
▫ Lovaina
A media mañana llegamos a la preciosa ciudad de Lovaina o Leuven (en flamenco), pero antes de adentrarnos en su casco histórico, hacemos una parada en la afueras, en el Castillo de Arenberg.
Un enorme castillo con una extensa zona verde, con lagos y cines incluidos, que hoy en día son parte de la universidad pública de Lovaina.
Un lugar de ensueño en el que dan ganas de volver a ser universitario, la verdad.
Dejamos el coche en nuestro céntrico hotel y nos encaminamos a conocer la animada ciudad.
➜ Tuvimos la suerte de poder descubrir la ciudad con una visita guiada. No las hay todos los días, pero si te cuadra no lo dudes y reserva este estupendo Free Tour por Lovaina.
Recorremos la preciosa avenida principal de Lovaina, Bondgenotenlaan, hasta llegar al punto de encuentro, la Plaza de los Mártires (Martelarenplein) donde está la bonita estación de tren de Lovaina.
La siguiente parada es una de las plazas más grandes de Lovaina, Ladeuzeplein, donde está ubicada la impresionante Biblioteca de la Universidad. Se puede subir a su gran torre y disfrutar de unas vistas únicas de Lovaina.
Pero sobre todo no debes perderte la visita a su antigua sala de lectura.
Y llegamos al Grote Mark de Lovaina. Esta plaza no es como el resto de plazas que hemos visto hasta y está compuesta por 3 grandes edificios: el Tafelrond, antigua casa gremial que actualmente es un hotel de lujo, la Iglesia de San Pedro (St Pieterskerk) y el impresionante Ayuntamiento de Lovaina (Stadhuis).
La singular fachada del Ayuntamiento te va a dejar boquiabierto y es que está decorada con más de 300 esculturas.
Muy cerca está Oude Markt, una bonita plaza adoquinada que presume de ser la barra de bares más larga de Europa. Y es que vas a alucinar con la cantidad de bares y terrazas que hay aquí y en las calles adyacentes. Una fiesta diaria para los universitarios…
Tomamos la calle Namsestraat y disfrutamos de la bella fachada barroca de la Iglesia de San Miguel, levantada por los jesuitas en el siglo XVII.
Pasear por las callejuelas de Lovaina es una gozada, lleno de edificios históricos de ladrillo rojo reconvertidos en distintas sedes de universidades.
Y así llegamos a otra de las joyas de Lovaina, el Gran Beatorio o la ciudad dentro de la ciudad. Un remanso de paz junto al río Dilje declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Donde antes vivían cientos de beguinas, ahora los estudiantes tienen su residencia.
Otros lugares interesantes de Lovaina son el Jardín botánico, la fábrica de cerveza Stella Artois o la Abadía del Parque. Están algo alejados por lo que una gran idea es alquilar una bici y pedalear para llegar hasta ellos.
➜ ¿Dónde dormir en Lovaina?
Para pasar la noche en Lovaina nos decantamos de nuevo por el Getaway Studios Leuven ubicado a dos pasos del Ayuntamiento y la Catedral.
La habitación es una buhardilla súper espaciosa, con cocina y garaje. ¡Como en casa!
Días 10 y 11: Bruselas
Durante los 2 siguientes días de nuestro itinerario por Bélgica en coche durante dos semanas, los vamos a dedicar a conocer la capital de Bélgica, Bruselas.
La excelente conexión de vuelos baratos con el resto de las ciudades europeas hace que esta ciudad llena de europarlamentarios en invierno, se llene de turistas en época estival.
Dos días son ideales para conocer los lugares más importantes de Bruselas, aunque si estás interesado en visitar algunos de sus estupendos museos no está de más añadirle un tercer día.
Nuestras visita cuadró en viernes y sábado por lo que el buen ambiente de la ciudad era total.
Te cuento cuál fue nuestro recorrido cada uno de los días en Bruselas de forma resumida. Al final del post puedes leer nuestra Experiencia Viajera por Bruselas al completo.
▫ Bruselas (día 1)
En nuestro décimo día de ruta por Bruselas nos espera un día intenso, pero muy bonito.
Mañana es sábado, por lo que algunos lugares están cerrados, y tenemos que verlos hoy sí o sí.
Por ello, a las 8.30 de la mañana ya estamos plantados en la puerta de nuestro hotel. Todavía es muy pronto para hacer el check-in, pero nos dejan meter el coche en el parking del hotel.
Nuestra primera visita queda muy cerca, el impresionante Palacio de Justicia que mandó construir Leopoldo II. Fue su obra más ambiciosa, siendo su extensión más grande que la Basílica de San Pedro del Vaticano.
Vas a alucinar con su tamaño exterior y la grandeza de sus columnas clásicas y sus esculturas arquetípicas, pero además puedes visitar su interior de forma gratuita.
En la vecina Plaza Poelaert, puedes contemplar una de las mejores vistas de Bruselas. Desde aquí puedes bajar con un ascensor a la parte baja, a Marolles.
Una vez visitado nuestro primer imprescindible de Bruselas, seguimos caminando por la ciudad hasta llegar a la estación central (Gare Central).
➜ Desde aquí parte nuestra primera visita guiada del día. Vamos a realizar un fantástico Free Tour por el Barrio Europeo, donde conoceremos la historia de Unión Europeo, sus edificios más importantes y sus funciones.
Al terminar la visita, a las 12:45 horas tenemos reservada la entrada al Parlamento Europeo, para ver el hemiciclo donde los europarlamentarios toman las decisiones. Realmente merece la pena conocerlo.
Nos damos un paseíto de casi 2 kilómetros, atravesando el agradable Parque de Bruselas, para visitar la Catedral de San Miguel y Santa Gúdula. Una impresionante obra gótica de Brabante que no debes perderte.
Y por fin nos sentamos en la terraza de un McDonalds frente al impresionante edificio de la antigua Bolsa de Bruselas. Tenemos algo más de una hora para descansar y reponer fuerzas antes de nuestra siguiente visita.
➜ A las 15:30 empezamos una visita guiada para conocer los lugares imprescindibles de la ciudad. Es un Free Tour por Bruselas que no debes perderte por nada del mundo. Es muy completo y durante 2 horas y media conocerás todos los rincones.
Podríamos haber dejado este tour para mañana, pero estábamos impacientes por conocer la ciudad. Lo ideal hubiera sido hacerlo a la mañana y hacer la siguiente mañana el tour por el Barrio Europeo, pero al ser sábado y estar cerrado no se hace.
La visita comienza en la Grand Place de Bruselas, la más impresionante de todas las que hemos visto en Bélgica, gracias a su majestuoso ayuntamiento y el color dorado de las casas gremiales.
Con un recorrido muy ameno conocemos todos los lugares imprescindibles de la ciudad baja como del Barrio Real de la ciudad alta: el Manneken Pis, el Palacio Real, los Museo Reales de Bellas Artes, las antiguas murallas o la Iglesia de Notre Dame du Sablon, entre otros.
Estamos exhaustos y tras terminar la visita nos retiramos a nuestro hotel para disfrutar de un buen plato de pasta en nuestra cocina y ver una serie en familia.
➜ ¿Dónde dormir en Bruselas?
Durante las dos noches que nos alojamos en Bruselas elegimos el Citadines Toison d’Or Bruselas Aparthotel, a 15 minutos andando de la Grand-Place y con una estación de metro al lado, Louiza.
Una habitación muy espaciosa con cocina que nos vino muy bien para desayunar y cenar.
▫ Bruselas (día 2)
Nuestro segundo día en Bruselas es mucho más relajado, ya que ayer descubrimos todos los lugares imprescindibles tanto de la ciudad baja como de la ciudad alta.
Hoy vamos a conocer uno de los símbolos de Bruselas, el Atomium, que queda algo más alejado de la ciudad, en Laeken concretamente, a unos 6 kilómetros.
Se puede llegar hasta allí en unos 40 minutos metro, pero como tenemos coche aprovechamos para ir en menos tiempo y a nuestro aire.
De camino, nuestra primera parada es la Basílica de Sacre-Cour, con su enorme cúpula verde de cobre a 90 metros sobre el suelo.
Tras pasear por su enorme interior ponemos rumbo a Laeken, un enorme espacio verde donde se encuentra la residencia de los monarcas belgas.
Además, en esta apacible zona también están el estadio deportivo, los palacios de las exposiciones, la mayor sala de conciertos de Bruselas, el parque de atracciones Bruparck, el Planetario, Mini-Europe y el Atomium.
La verdad es que el Atomium de Bruselas es realmente bonito y cuando lo veas de cerca te va a maravillar.
Se creó para la Exposición internacional de 1958 y aunque iba a ser algo temporal, se quedó como símbolo de la ciudad, igual que sucedió con la Torre Eiffel.
Se pueden visitar 5 de las esferas del átomo y aunque las vistas de van a dejar un poco chof, merece la pena pasear por ellas disfrutando de las exposiciones y los efectos de luces.
Nosotros compramos la entrada combinada para visitar también en el Mini- Europe.
➜ Si solo estás interesado en visitar el Atomium tienes dos opciones para evitar colas: llegar pronto o llevar la entrada ya comprada sin sobrecostes. De esta forma te evitas la cola de compra y solo tendrás que esperar para entrar. Y créeme en temporada alta las colas son largas.
Tengo que confesar que la visita Mini-Europe me dejó fascinada.
Es un recorrido súper relajante entre las maquetas de los lugares más representativos de cada país de la Unión Europea. Estuvimos casi una hora y media y me hubiera quedado más…
Compramos unas ensaladas de pasta en el supermercado y nos las comemos tan ricamente en nuestro apartahotel. Tras descansar un rato cogemos el metro en Louise hasta la parada de Merode en el Parc du Cinquantenarie.
Junto al gran Arco del Triunfo del Palacio de Leopoldo hay 3 importantes museos y nosotros vamos a visitar Autoworld, una de las mejores colecciones de coches del mundo.
Un visita muy recomendable si te gustan los vehículos y conocer su historia.
Tras la visita cogemos de nuevo el metro hasta la parada De Brouckère a 5 minutos de la Grand Place.
Pasamos la tarde callejeando por el centro histórico de Bruselas, saludamos de nuevo al Manneken Pis y también a su homónima femenina Jeanneke Pis ubicada junto a la mítica cervecería Delirium Tremens.
Tras recorrer las Galerías Reales Saint-Hubert, la primera calle comercial cubierta de Europa, compramos algún recuerdo, un goffre y tomamos algo en un pub inglés disfrutando de un partido de fútbol.
Ponemos la guinda a estos dos fantásticos días en Bruselas cenando en el restaurante La Terrasse, una típica Carbonada flamenca y unos moules a la marinera.
Volvemos a nuestro alojamiento caminando, disfrutando de la cara nocturna de Bruselas con todos sus grandes edificios iluminados y con el impresionante ambiente de sus calles.
➜ ¿Dónde dormir en Bruselas?
Si durante tu estancia en Bruselas vas a aprovechar para hacer excursiones en tren a otras joyas de Bélgica como Brujas, Gante o Amberes, una buena idea es alojarse cerca de la Estación Central.
Uno de los hoteles mejor valorados por su gran relación calidad-precio es Le Vaudeville, con desayuno incluido. Junto a la Grand Place y a 400 metros de la estación.
Día 12: Namur y Dinant
En nuestro día 12 de ruta por Bélgica en coche dejamos atrás la capital del país para adentrarnos de nuevo en la región de Valonia, donde los paisajes son más rurales y la lengua es el francés.
Tras una hora de conducción visitaremos Namur cuyo principal atractivo es la Ciudadela en lo alto y sus pasadizos subterráneos.
Tras una breve visita continuamos hasta el precioso pueblo valón de Dinant, a orillas del Mosa y bajo la atenta mirada de la impresionante Ciudadela sobre una gran roca caliza. También es la ciudad de los saxofones y los verás por doquier.
▫ Namur
El centro histórico de Namur nos decepcionó mucho, ya que siendo la capital de Valonia nos esperábamos más.
Primero visitamos la Catedral Saint Aubain, nada del otro jueves, la verdad…
Y luego llegamos a la Plaza de Armas con un par de bonitos edificios, como el edificio de la Bolsa adosado a un arco y el curioso Beffroi de forma cónica.
Su principal atractivo es la Ciudadela de Namur accesible andando, en coche o en teleférico.
Es un gran recinto donde hay un teatro, un casino y un par de palacetes, entre otros.
Su gran reclamo son las visitas guiadas que ofrece por los subterráneos explicando cómo se construyeron, cómo vivían los soldados y su objetivo.
No hay visitas en español, así que si no es un tema que te apasione, yo te aconsejo que no visites esta ciudad.
Lo mejor las vistas de Namur con el río como protagonista que se obtienen desde la Ciudadela.
▫ Dinant
Y llegamos a Dinant, un precioso pueblo de Valonia custodiado por la Ciudadela elevada en la montaña, con las casas de colores mirando al río Mosa y la enorme Colegiata de Notre-Dame como protagonista.
La mejor foto de Dinant se obtiene desde el lado derecho del río, junto a la Oficina de Turismo de Dinant.
Dinant es mundialmente famosa por ser la ciudad del saxofón, ya que el inventor de este instrumento, Adolphe Sax, nació aquí.
Paseando por Dinant verás coloridos saxofones por doquier decorando cada rincón: plazas, farolas, calles… Los más bonitos son los saxofones que adornan el puente Charles de Gaulle.
Además el señor Sax cuenta con un pequeño museo gratuito en la que fuera su casa natal y en la que te espera sentado en un banco para sacarse una foto contigo.
Dinant cuenta con un animado paseo junto al río lleno de terrazas y en las que podrás subir a un barco y dar un pequeño paseo de 45 minutos hasta la exclusa, pasando por la curiosa formación rocosa de Rocher Bayard.
Se puede hacer caminando, pero ir en barco siempre es más relajante.
Pero sin duda la visita imprescindible de Dinant es su Ciudadela, que se conserva en un estado impresionante. Está genial ambientada y créeme, te va a sorprender de verdad.
Se puede subir andando por sus 408 escalones o en el teleférico. El precio es el mismo, así que tú decides…
Por cierto, si te gusta probar cervezas, hay un pequeño museo de la cerveza local Leffe en la antigua abadía en la que se fabricaba. Al finalizar la visita podrás degustarla y te dan dos latas de cerveza Leffe y una copa.
➜ ¿Dónde dormir en Dinant?
Dinant no cuenta con mucha opción asequible para 4 personas, pero por suerte encontramos el Hotel Les Voisins De Mr Sax.
Es un alojamiento muy sencillo, pero ubicado bajo la Ciudadela y con vistas al río Mosa. ¡Ideal para pasar una noche!
Día 13: Grutas de Han, Zoo de Han y Durbuy
Nuestra completa ruta por Bélgica en coche va llegando a su fin.
Hoy vamos a pasar un día de ocio visitando unas cuevas con curiosas formaciones, las Grutas de Han, y su pequeño Zoo anexo, en la localidad de Han-sur-Lesse.
Nuestro último destino del día es la ciudad de Durbuy, que tiene el título de la ciudad más pequeña del mundo.
▫ Grutas de Han
Tenemos reservada la visita guiada a las Cuevas de Han a las 10 horas. Es en francés por lo que no entendemos nada, pero al menos tienen un folleto en castellano para que podamos orientarnos.
La verdad es que las cuevas son una pasada con distintas formaciones y como colofón final hay una animación de luces y sonido de 360º proyectada en sus paredes.
▫ Zoo de Han
El Zoo de Han se encuentra ubicado en el mismo recinto.
Las cuevas y el zoo se pueden visitar por separado, pero nosotros optamos por una entrada conjunta y pasar una tranquila mañana.
En el zoo no hay grandes animales, exceptuando el oso, el lobo y el lince, y la mayoría son muflones y renos en sus distintas especies.
Pero es un zoo diferente, ya que permite recorrerlo a pie por senderos de distinta duración o en un tren turístico.
Nosotros optamos por la segunda opción y es todo un acierto, ya que el tren va parando al lado de cada animal y da una pequeña explicación. La verdad es que pasamos una hora y media muy a gusto.
Tras el recorrido nos tomamos unas hamburguesas y un helado en uno de los bares del recinto.
Hay una gran zona columpios para niños de todas las edades y estos se lo pasaron a lo grande.
Antes de irnos visitamos el pequeño museo Prehistórico, incluido en la entrada, con restos de objetos encontrado en la cueva y con información geológica sobre la misma.
▫ Durbuy
Sobre las 4 de la tarde llegamos a Durbuy, que ostenta el título de la ciudad más pequeña del mundo.
Lo primero que hacemos es alojarnos. Es un agroturismo con una decoración impresionante y con centro de bienestar.
Lo mejor es la enorme bañera que nos aguarda en la terraza de la habitación, donde los 4 disfrutamos de lo lindo.
Además tenemos acceso a la sauna y a los chorros de agua fría. ¡Una experiencia insuperable para recargar pilas!
A media tarde nos acercamos a Durbuy, un precioso pueblito con calles empedradas, castillos nobles como el Castillo de los Condes de Ursel, casas de piedra y con muchos restaurantes.
Para que te hagas una idea es de esos típicos pueblos con encanto como Santillana del Mar en Cantabria o Pals en Cataluña.
Como ya había cerrado no pudimos visitarlo, pero su actividad estrella es el Parque de los Topiarios. Aquí los arbustos se transforman en esculturas: Manneken Pis, elefantes, gigantes…
➜ ¿Dónde dormir en Durbuy?
Sin duda el Petit-Bomal Farm Suites fue uno de los grandes momentos de las vacaciones.
Tras tantos días de ruta descansar en un lugar como este fue todo un acierto. Un lugar donde se respira hospitalidad, mimo y mucha paz. El desayuno casero impresionante y la bañera y la sauna un 10.
Día 14: Bouillon, Sedán y Chinón
En nuestro último día de ruta en coche por Bélgica el objetivo es ir acercándonos a casa para que la vuelta no se haga tan larga.
Por ello, la noche la hacemos en Chinón, un bonito pueblo del Valle del Loira en Francia.
Antes paramos un ratito en Bouillon, un coqueto pueblo valón en la frontera que cuenta con bonitas casas y un castillo.
A 20 minutos de la frontera hacemos una pequeña parada en Sedan, ya que cuenta con el castillo medieval más grande de Europa.
Y tras 5 horas largas de viaje llegamos a Chinón, donde nos espera una piscina para relajarnos en el hotel.
▫ Bouillon
Bouillon es un pueblo valón en la frontera con Francia erigido a ambas orillas del río Semois y rodeada de verdes parajes.
Las casas son muy bonitas, de color blanco y con los tejados de pizarra negro.
Pero su gran joya es el Castillo de Bouillon en el que se alojó Godofredo de Bouillon antes de partir a las cruzadas. Es el vestigio feudal más antiguo de Bélgica y una de las fortalezas de Europa más destacadas.
Si te apetece se puede visitar por dentro.
▫ Sedán
Nuestra siguiente parada de este viaje es ya en tierras francesas, concretamente en Sedán.
En este pueblo junto al río Mosa se encuentra el Chateau de Sedan, el castillo fortificado más grande de Europa.
Nosotros nos conformamos con admirar sus impresionantes murallas por fuera y desde el patio interior de acceso gratuito, pero hay opción de visitar su interior.
▫ Chinón
Tras 5 horas metidos en el coche no hay nada mejor que estirar el cuerpo dándote un baño en la piscina del hotel.
Después dimos una vuelta por el centro histórico de Chinón que parece un auténtico plató medieval.
Ya conocíamos este pueblo de nuestra ruta por el Valle del Loira que hicimos hace 9 años, pero nos vuelve a sorprender.
Casas de los siglos XV y XVI, mansiones como el Palais du Gouvernement o la Maison Rouge y en lo alto el impresionante castillo de Chinón.
Por dentro está prácticamente en ruinas, pero verlo por fuera es una pasada. Por cierto, fue un santuario para Juana de Arco.
➜ ¿Dónde dormir en Chinón?
Te recomiendo alojarte en el Hotel Ibis Styles Chinon que nos alojamos nosotros, muy cerca del casco histórico, con parking y con piscina.
Además, cuenta con restaurante donde cenar y poder desayunar a la mañana, a un precio increíble.
Día 15: Chinón y Vuelta a casa
Las vacaciones por Bélgica llegan a su fin.
Ponemos rumbo a nuestro hogar, dulce hogar.
Tenemos 7 horas por delante, aunque la cosa se complica hasta las 9 horas por un incendio que obliga a cortar la autopista una vez pasado Burdeos.
Es un verano con elevadas temperaturas y por desgracia el fuego lleva días haciendo estragos.
En estos momentos es cuando se agradece contar con google maps que nos aleja del peligro y nos lleva por rutas alternativas, hasta llegar a casa sanos y salvos.
¿Cómo llegar a Bélgica?
Para llegar a Bélgica desde España dos son las formas más comunes:
- En Coche
- En Avión.
La segunda opción, la de llegar en avión, es la más habitual por lo económicos que son los vuelos desde la mayoría de ciudades de España hasta Bruselas.
➜ Te animo a que consultes distintas ofertas en el buscador de vuelos que utilizamos nosotros para viajar.
¿Cómo moverse por Bélgica?
Una vez has llegado a Bélgica y quieres hacer una ruta para conocer los pueblos y ciudades más bonitas, 3 son los medios que te recomiendo para moverte por el país belga:
1. Moverse por Bélgica en Coche
Si has llegado a Bélgica en tu propio coche, lo tienes fácil. Bélgica cuenta con una excelente red de carreteras y autovías y todas ellas gratuitas.
Las distancias para ir de un pueblo a otro no son grandes, por lo que una ruta por Bélgica como la que te he contado se hace muy amena.
➜ Si llegas en avión y te apetece hacer una ruta en coche, te dejo el comparador de alquiler de coches que usamos en nuestros viajes cuando lo hacemos así.
2. Moverse por Bélgica en Tren
Muchos turistas llegan a Bélgica en avión y luego visitan algunos de los pueblos y ciudades belgas más importantes en tren.
Bélgica cuenta con una increíble red ferroviaria y se llega de un sitio a otro en poco tiempo y a buen precio, ya que hay bonos.
Lo más cómodo es hacer base en Bruselas y hacer excursiones de un día a los pueblos cercanos.
Otra opción es dormir en cada uno de los lugares que visites. La única pega es que tendrás que cargar con la maleta de un lado a otro y buscar consignas o ver si en tu alojamiento puedes dejar tu equipaje antes de hacer el check-in.
Aquí te dejo la distancia en tren desde Bruselas a otras ciudades turísticas de Bélgica:
- Distancia en tren de Bruselas a Brujas: 1 hora y 7 minutos.
- Distancia en tren de Bruselas a Gante: 41 minutos.
- Distancia en tren de Bruselas a Amberes: 42 minutos.
- Distancia en tren de Bruselas a Lovaina: 20 minutos.
- Distancia en tren de Bruselas a Tournai: 1 hora y 13 minutos.
- Distancia en tres de Bruselas a Mons: 56 minutos.
- Distancia en tren de Bruselas a Dinant: 1 hora y 30 minutos.
3. Excursiones organizadas desde Bruselas
La tercera opción para descubrir los pueblos más bonitos de Bélgica es hacer base en Bruselas y contratar excursiones desde aquí.
Obviamente es algo más caro que ir por tu cuenta, pero tiene la ventaja de que no te preocupas de nada. Además, cuando llegues a cada lugar una guía local te desvelará todo los lugares secretos y aprovecharás el tiempo a tope.
¡Y qué son las vacaciones sino momentos para disfrutar y no pensar en nada!
¡Las mejores visitas desde Bruselas!
Aquí te dejo los enlaces a mis excursiones favoritas desde Bruselas:
Consejos para organizar una Ruta por Bélgica en coche o tren
Estas son las conclusiones principales de nuestra Experiencia Viajera o recorrido por Bélgica en coche durante dos semanas que espero te sirven como sugerencias si estás pensando en hacer algo similar:
- Si quitamos los días de ida y vuelta, nuestra estancia en Bélgica ha sido de 12 días. Considero que es un número adecuado de días para ver los lugares más imprescindibles de Bélgica, aunque si no tienes tantos días es posible reducirlo.
- Nuestro ritmo de visitas ha sido adecuado, visitando un lugar importante cada día, como Brujas o Gante, y dos pueblos cuando estos son más pequeños.
- Como has podido ver 2 días enteros con sus noches son suficientes para ver Bruselas, pero si quieres visitar algún museo tendrás que dedicarle un tercer día.
- Te recomiendo que le dediques un día a Brujas y otro día a Gante. Mucha gente visita los dos en una excursión de un día, pero si tienes tiempo es mejor disfrutar más.
- Un día es suficiente para conocer Amberes, pero si te interesan los museos deberás dedicarle 2 días.
- El resto de pueblos que hemos visitado, Dinant, Mons, Ypres…, es suficiente con dedicarles medio día.
- Si tus días de vacaciones te lo permiten y te gustan los animales, no te pierdas por nada del mundo el Zoo de Pairi Daiza. ¡Es una pasada!
- De los lugares que hemos visitado, creo que no es imprescindible el día en la costa belga. Aunque claro está que si el tiempo hubiera acompañado probablemente la sensación sería otra. Así que incluirla o no lo dejo en tus manos.
- No te recomiendo que visites Namur, a no ser que domines el francés y estés interesado en hacer la visita guiada a los subterráneos de la Ciudadela.
- Durbuy es bonito, pero es un pueblo muy pequeño, por lo que sino vas a ver nada más en la zona, no pasa nada sino lo conoces.
- El día de las Grutas de Han y el zoo lo pasamos genial, pero sino viajas con niños o no te van las cuevas pues también puedes saltártelo.
- En cambio se nos ha quedado en el tintero la ciudad de Lieja. He leído que hay a personas que les enamora y a otros que no les gusta nada, así que no sé qué decirte.
- Y si te gustan los sitios históricos de la I Guerra Mundial, deberás visitar Waterloo y dedicarle un día entero a la zona de Ypres o a la zona de la Roche-en-Ardenne.
- Si dispones de pocos días en Bélgica, 4 o 5, lo mejor es hacer base en Bruselas y visitar las 3 joyas de Flandes (Brujas, Gante y Amberes) en tren.
- Si dispones más de 5 días para disfrutar de Bélgica lo mejor es que lo hagas en coche propio o de alquiler. Puedes tomar como base nuestra ruta y adaptarla a tus gustos. En los post específicos de qué ver en cada pueblo te amplio la información de las cosas importantes que hay para ver, aunque a veces nosotros no las hayamos visitado.
- Mi consejo es que hagas noche en cada una de las ciudades visitadas: Lovaina, Brujas, Gante… Por la noche los lugares se transforman y se disfruta de otra manera.
- Los horarios en Bélgica son escasos incluso en verano. Los museos e iglesias abren sobre las 9 y cierran a las 6 o antes, por lo que es un factor muy importante a tener en cuenta para organizar tu ruta.
- El precio de la comida en los restaurantes es muy similar a la nuestra, pero si te va el agua, prepara unos 9€ por botella de litro. ¡Un auténtico robo!
- Los precios de las atracciones turísticas en Bélgica son elevados, sobre todo los de los campanarios, castillos y museos.
- Recuerda que en la zona de Flandes hablan flamenco y no les gusta nada que se les hable en francés.
- En la zona de Valonia hablan francés y en muchos sitios tendrás problemas para que te hablen en inglés.
- No te puedes ir de Bélgica sin probar sus wafles o gofres, el guiso de carne de carbonada flamenca, las patatas fritas y los moules (mejillones). Y por supuesto, el chocolate belga y las cervezas locales de cada pueblo.
- ¡Disfruta de Bélgica y su tranquilidad!
↻ Prepara tu viaje a Bélgica cómodamente
Aquí tienes algunos recursos para que la organización de tu viaje sea más fácil. Utilizando estos enlaces irás directamente a las webs donde podrás contratar los servicios o productos sin ningún sobrecoste para ti y a nosotros nos ayudas a mantener el blog de Experiencias Viajeras. ¡Muchas gracias!
Consigue los vuelos más baratos y vuela feliz
Las mejores ofertas de alojamiento: hoteles, apartamentos…
Las actividades más divertidas y tours para disfrutar
Compara los alquileres de coche y viaja libre
Viaja siempre sin preocupaciones y muy seguro
¿Qué te ha parecido nuestra Experiencia Viajera por Bélgica? ¿Incluirías algún otro pueblo a la ruta por Bélgica en coche?